Por Edward Manuel Sosa Brito
Queridos hermanos y colegas:
Es momento de hacer una pausa y reflexionar seriamente sobre el rumbo que están tomando las construcciones de las infraestructuras deportivas en nuestra provincia.
Con profundo respeto y sin tintes políticos, hago un llamado a todos los actores involucrados y a la ciudadanía a ejercer una mirada crítica y democrática.
No podemos seguir siendo indiferentes ante obras que impactarán directamente el desarrollo del deporte local. Estas instalaciones no son para unos pocos: son para el disfrute y crecimiento de toda la comunidad.
Considero urgente que se convoque una reunión formal con las autoridades responsables para tratar diversos puntos, entre ellos:
Presentación y explicación pública de las maquetas y diseños arquitectónicos.
Espacios para escuchar y considerar sugerencias de entrenadores, atletas, dirigentes y usuarios.
Garantizar que se construyan instalaciones duraderas, funcionales y con estándares profesionales.
Específicamente, en la cancha Ambrosio Estévez, es evidente que la ventilación es deficiente y que la grada antigua debe ser demolida y rediseñada.
La cancha no cumple con las medidas adecuadas para deportes como el voleibol, principalmente por la escasa altura del techo.
Sería un gran acierto construir una instalación tipo «estilo Mao y Rodríguez», con la cancha más profunda, brindando espacio suficiente para un juego seguro y profesional.
La Unión Deportiva de Dajabón debe asumir su rol protagónico en este proceso y convocar a una rueda de prensa donde se expongan estas inquietudes, se hagan propuestas concretas y se exija transparencia en todo el proceso.
El deporte también es desarrollo. Dajabón merece instalaciones dignas, modernas y con visión de futuro.
Que no nos falte la voz cuando el silencio puede convertirse en complicidad.